La cantante estadounidense lanza su séptimo álbum, desafiando expectativas y marcando su propio camino en el pop.
Sabrina Carpenter ha vuelto con fuerza. Este viernes 29 de agosto, la cantante lanzó su séptimo álbum de estudio, titulado Man’s Best Friend, y ya está dejando huella. Con un sonido chicloso que fusiona pop, discos sintéticos y toques de música disco, el proyecto explora temas profundos como corazones rotos, encuentros fugaces y relaciones sin compromiso, pero con un giro de empoderamiento personal.
El poder de los perros y una metáfora poderosa
La elección del nombre «Man’s Best Friend» no es casualidad. Sabrina, que ha estado compartiendo pistas de su disco acompañada de perros, tiene claro lo que quiere transmitir. En la portada del álbum, incluso se muestra de manera irónica como «el mejor amigo del hombre», una imagen que esconde un mensaje mucho más complejo: Sabrina no será domesticada. Ella no está aquí para ser un accesorio sentimental; ella es la que dicta las reglas, la que toma las riendas.
El álbum se abre con Tears, un sencillo que mezcla referencias a películas icónicas como The Rocky Horror Picture Show y Jeepers Creepers, y que deja en claro el mensaje de la artista: el amor es un juego y ella es la jugadora principal. Aquí, la artista señala que lo que realmente le interesa es que su pareja tenga inteligencia emocional y responsabilidad afectiva. Si no lo tiene, Sabrina se muestra lista para decir «Goodbye» con la misma fuerza que ABBA lo hacía.
Una Sabrina más salvaje y decidida
A lo largo de las 13 canciones del disco (incluyendo el bonus track Such a Funny Way), Sabrina revela una versión más atrevida y decidida de sí misma. Si en su álbum anterior Short N’ Sweet ya tocaba temas como el amor no correspondido y los dilemas sentimentales, en Man’s Best Friend da un paso más allá: no se trata solo de ser una mujer con corazón roto, sino de ser una mujer que sabe poner límites.
En canciones como Don’t Worry, I’ll Make You Worry, Sabrina explora técnicas como ghosting y ley del hielo, haciendo un guiño a los comportamientos tóxicos que ha sufrido en el pasado, pero con un toque irónico y sabio: «Donde las dan, las toman».
Libertad y empoderamiento en las letras
Sabrina Carpenter nunca ha tenido miedo de ser transparente en sus letras, y Man’s Best Friend lo demuestra. No es común que una artista con su imagen de «chica dulce» hable de temas como deseo sexual, celos y superficialidad, pero Sabrina lo hace con una ironía que hace que el tema sea tanto divertido como provocador. En canciones como Sugar Talking, When Did You Get Hot y Go Go Juice, Carpenter deja claro que, aunque no es perfecta, se siente libre de explorar su sensualidad y disfrutar de una vida sin compromisos.
El álbum también explora el lado más juguetón de Sabrina, quien en su House Tour utiliza una metáfora audaz al comparar su cuerpo con una casa. El estribillo de la canción dice:
«Podría llevarte a la primera, segunda y tercera planta y te prometo que nada de esto es una metáfora. Solo quiero que entres dentro, pero nunca por la puerta trasera».
Aquí, Sabrina juega con los dobles sentidos de manera sublime, y la «casa» se convierte en una alegoría de su propio cuerpo, desafiando los límites de lo que se espera de una artista de su perfil.
Empoderamiento y autenticidad
Sabrina Carpenter no solo quiere ser la mejor amiga del hombre; ella quiere ser la amiga y la musa de todos los que la siguen, especialmente de sus gays & girls. En este álbum, busca darle voz a todas las crónicas de desdicha amorosa, mientras impulsa la autoestima de quienes la escuchan.
Man’s Best Friend es un disco de empoderamiento, de risas sarcásticas y de letras que invitan a la reflexión, todo bajo el sello de una artista que ya no tiene miedo de mostrar su lado más salvaje, sensual y real.
Sabrina Carpenter: la maestra de los dobles sentidos
Con Man’s Best Friend, Sabrina Carpenter perfecciona la técnica de los juegos de palabras y las metáforas. Si Short N’ Sweet nos sorprendió con su irreverencia, este álbum lleva la ironia y los dobles sentidos a nuevos niveles, mostrando una Sabrina más segura y provocativa que nunca. Ella nos demuestra, una vez más, que puede ser todo lo que quiera, sin pedir permiso ni disculpas.
Fuente: Los 40
