La cantautora colombiana visitará Lima este 12 de octubre para presentar su primer álbum y celebrar junto a sus fans el inicio de una nueva etapa musical.

La música de Ela Taubert ha encontrado eco en miles de personas, pero también en la industria: hace un año, la joven artista colombiana recibió el Latin Grammy a Mejor Nuevo Artista, un logro que —lejos de marearla— la ha impulsado a reafirmar sus convicciones creativas.
“El premio fue un momento mágico que viví con los pies en la tierra. Lo tomé con gratitud, asombro y mucha humildad, porque aunque uno lo sueña, cuando pasa de verdad, se vuelve inolvidable”, cuenta Ela en conversación con Correo. “El Grammy me recordó que este camino no se trata solo de mí, sino de toda la gente que me escucha, que cree en lo que escribo”.
La intérprete llegará a Lima el 12 de octubre, para presentarse en el Centro de Convenciones Barranco con un show que reunirá sus mayores éxitos y las canciones de su nuevo disco.
Un debut con preguntas y respuestas
“Preguntas a las 11:11” es el nombre del primer álbum de Ela Taubert, una obra íntima y sincera que —según ella misma— representa su identidad artística. “Este álbum me permite aterrizar todo lo que he venido explorando. Soy una persona muy reflexiva, y eso se nota en las letras. Veo el mundo con matices muy marcados, entre lo fuerte y lo sensible, lo azul y lo rosado”.
Su más reciente sencillo, “No Supiste Cuidarnos (Respuesta #2)”, en colaboración con Jay Wheeler, ahonda en ese universo emocional donde vulnerabilidad y fuerza conviven.
¿Presión después del Grammy?
Recibir un Latin Grammy podría parecer una meta cumplida, pero también trae expectativas. ¿Genera ansiedad? Ela responde con honestidad: “Claro que hay dudas. Me pregunto: ¿les gustará esto nuevo? Pero cada vez que me siento así, mis fans me lo quitan de la cabeza. Me han hecho sentir libre de ser quien soy”.
Reconoce que en la industria musical es normal sentir la presión de “seguir pegando”, pero cree que la clave está en no traicionarse. “Cuando uno es auténtico, eso se nota. La gente lo siente y lo agradece”.
La escritura como necesidad
Para Ela, escribir canciones no es una estrategia, es una necesidad vital. “Mi proceso creativo sigue igual que cuando empecé. Escribo desde lo que siento, desde lo que vivo. No hay fórmula: simplemente nace. Y gracias a que la gente conectó con eso desde el inicio, he podido seguir fiel a mí misma”.
Un encuentro especial con Lima
Ela no esconde su entusiasmo por reencontrarse con su público peruano. “Los conciertos son lo más especial para mí. Es el momento donde ves cara a cara a quienes te han acompañado con sus escuchas, sus mensajes, su apoyo. Es un amor muy real y muy recíproco. Lo que siento en el escenario con ellos, no se compara con nada”.