La sublevación se produce en un momento tenso para el país gobernado por Luis Arce, quien está actualmente en una disputa con su mentor, Evo Morales, por el control de su partido y en torno a quién será su candidato en las elecciones de 2025
Un general de alto rango declaró que estaba liderando un esfuerzo para “reestructurar la democracia”, pero él y sus aliados en las fuerzas armadas se retiraron tras intentar irrumpir en el Palacio Presidencial.
El miércoles, tras intentar irrumpir en el palacio presidencial de Bolivia, miembros del Ejército del país, dirigidos por un general de alto rango, se retiraron rápidamente en un aparente intento fallido de golpe de Estado.
Un video transmitido en la televisión boliviana mostró a las fuerzas de seguridad con equipamiento antidisturbios ocupando la plaza principal de la capital administrativa, La Paz, un tanque camuflado embistiendo una puerta del palacio y soldados tratando de abrirse paso hacia el palacio.
Acto seguido, tan pronto como aparecieron, el general, Juan José Zúñiga desapareció, y sus partidarios de las fuerzas armadas se retiraron y fueron sustituidos por policías que apoyaban al presidente democráticamente electo del país, Luis Arce.
Arce se aventuró a salir a la plaza, tras llamar al pueblo boliviano a que “se organice y se movilice en contra del golpe de Estado, en favor de la democracia.”
En total, el intento de incursión vespertina al palacio duró solo tres horas. A medida que pasaban las horas, se hizo evidente que el plan de Zúñiga tenía poco apoyo y más tarde fue detenido.
Fuente: infobae