En un contexto en el que el cuidado de la salud mental se ha vuelto prioritario, cada vez más personas buscan prácticas cotidianas que les permitan equilibrar mente y cuerpo. Entre ellas, la música —y en especial el piano— se ha consolidado como una herramienta terapéutica de gran impacto y al alcance de todos.

Estudios han demostrado que la música activa regiones cerebrales asociadas con la memoria, la atención, la creatividad y la regulación emocional, además de reducir los niveles de cortisol, la hormona relacionada con el estrés. Así, tocar un instrumento musical no solo relaja, sino que también estimula funciones cognitivas esenciales para el bienestar diario.

El piano como aliado del autocuidado emocional
La psicóloga Yenny Flores, magíster en Psicología Clínica y de la Salud, señala que la práctica del piano puede convertirse en un ejercicio de autorregulación emocional.

“Tocar piano implica concentración, coordinación y control respiratorio. Es una actividad que nos obliga a estar presentes, a pausar y a reconectar”, comenta.

En colaboración con Casio Instrumentos, la especialista propone microrutinas musicales como tocar escalas de manera consciente o improvisar melodías suaves durante 10 minutos al día. Estos ejercicios permiten crear espacios de pausa y autocuidado dentro de la rutina.

Iniciar desde casa con tecnología accesible
Para quienes desean incorporar esta práctica, modelos digitales como el Privia de Casio ofrecen funciones ideales para el entorno doméstico:

• Teclado de acción martillo, que simula la sensación de un piano acústico
• Respuesta dinámica al tacto y sonido envolvente
• Diseño compacto para espacios reducidos
• Compatibilidad con la app Casio Music Space, que facilita el aprendizaje desde cero

Esta combinación de tecnología y diseño busca democratizar el acceso a los beneficios emocionales de la música, incluso sin experiencia previa.

“El bienestar emocional no siempre requiere grandes cambios. A veces, una rutina breve tocando el piano puede marcar la diferencia entre un día caótico y uno en calma”, concluye Flores.

Fuente: Diario Correo.